Ser Mamá y trabajar
Hace unos días escuchaba en un webinar sobre liderazgo positivo la posición de una empresa mexicana ante la equidad de género y la contratación de mujeres (entré tarde al webinar por lo que no recuerdo el nombre de la empresa, sino lo escribiría sin dudarlo)… me sorprendió escuchar que «les encanta trabajar con mujeres» pero que prefieren contratar mujeres con hijos mayores… ante la pregunta de porqué ésta segmentación llegó la obvia respuesta: las mujeres con niños pequeños faltan mucho…los niños se enferman, deben estudiar, dependen de la madre y la empresa pierde mucho dinero porque el personal está siempre con licencia…
Es cierto, como empresaria emprendedora sé lo difícil y muchas veces agotador que es juntar cada peso a fin de mes para poder pagar los sueldos de los empleados. Y también es cierto que hay empleados que no trabajan como para rentabilizar su sueldo. Pero ante esto tengo varios comentarios:
- No es culpa del chancho sino de quien le da de comer. Si un empleado no es rentable para la organización es un tema que la organización debe analizar y resolver. No tiene absolutamente nada que ver con que sea mujer, que tenga o no hijos, ni con que sea o no una persona que «trabaje». Como empresa hay que hacerse responsable de los empleados, sean buenos o malos y asumir que son nuestra responsabilidad.
- Una persona que presente licencia constantemente debe tener motivos para hacerlo, y en todos los casos, está en su derecho de que así sea.
Expuesto lo anterior, quiero contarles un poco mi experiencia con el modelo que instauré en CHAN! donde nuestra visión conjunta es generar un espacio de trabajo integrado con las personas, esto es, comprender que somos seres integrales, que no es posible disociarnos y ser madres/padres/hijos/hermanos/amigos después de las 18:00 al volver a casa del trabajo.
Al aceptar esta premisa todo cambia. Sin embargo, el mayor desafío ha sido encontrar a las personas correctas, las personas que CREAN que es posible y que realmente asuman esta libertad de construir el mundo con responsabilidad y compromiso. Para no irme por las ramas y escribir un libro acotaré esto a un tema específico: las mamás con hijos pequeños faltan más.
FALSO. La conducta se genera cuando el ambiente de trabajo no permite que la mamá pueda equilibrarse e integrar su maternidad con su cargo. Si le damos los permisos para estar en su casa, para limpiar el vómito de su hijo/a, para llevarlo al doctor, para dormir una siesta luego de una larga noche de fiebres, para confiar en que puede hacerlo y confiar nosotros como empresa de que esto pasará… entonces la magia ocurre.
Las mamás con hijos pequeños que trabajan en un espacio de confianza, motivación y libertad, son trabajadoras que producen más, que entregan más, que construyen más y que hacen crecer tu empresa.
Al que quiera debatir sobre esto, yo feliz de mostrarle con números y realidades cómo en CHAN!, donde más del 70% de la empresa son mujeres y la mayoría mamás, ES POSIBLE y cumplen con el 98% de sus compromisos, siendo el 2% de incumplimiento restante absolutamente nada que ver con los hijos.
El cambio comienza por casa, es más fácil culpar a los otros por el fracaso interno. Si en tu empresa hay muchas licencias y las madres no producen, entonces me parece que sería bueno que hagas una evaluación interna de los valores de la organización, las metas y el diálogo que tienes con los colaboradores para revisar cómo mejorar esos números. Somos responsables de lo que queremos lograr.
Let´s CHAN! the world.